La neuralgia posherpética (NPH) es una complicación común, grave y dolorosa del herpes zóster.

Los corticosteroides tienen propiedades antiinflamatorias y podrían ser beneficiosos.

Esta es una actualización de una revisión publicada por primera vez en 2008 y actualizada previamente en 2013.

OBJETIVOS. Evaluar los efectos (beneficiosos y perjudiciales) de los corticosteroides en la prevención de la neuralgia posherpética.

MÉTODOS DE BÚSQUEDA. Se actualizaron las búsquedas de ensayos controlados aleatorios (ECA) de corticosteroides para la prevención de la neuralgia posherpética en el Registro Cochrane Neuromuscular Especializado, CENTRAL, MEDLINE, Embase, otras dos bases de datos y dos registros de ensayos (junio de 2022).

También revisamos las bibliografías de los ensayos identificados, establecimos contacto con los autores y contactamos a las compañías farmacéuticas para identificar datos adicionales publicados o no publicados.

CRITERIOS DE SELECCIÓN. Se incluyeron todos los ECA que incluyeron corticosteroides administrados por vía oral, intramuscular o intravenosa para personas de todas las edades, con herpes zóster de todos los grados de gravedad dentro de los siete días posteriores al inicio, en comparación con ningún tratamiento o placebo, pero no con otros tratamientos.

RECOGIDA Y ANÁLISIS DE DATOS. Dos revisores identificaron de forma independiente artículos potenciales, extrajeron datos, evaluaron el riesgo de sesgo de cada ensayo y la certeza de la evidencia.

El desacuerdo se resolvió mediante discusión entre los coautores.

Seguimos la metodología Cochrane estándar.

RESULTADOS PRINCIPALES. Se identificaron cinco ensayos con un total de 787 participantes que cumplieron con los criterios de inclusión.

No se identificaron nuevos estudios para esta actualización.

Todos fueron estudios aleatorios, doble ciego, controlados con placebo y de grupos paralelos.

La evidencia es muy incierta acerca de los efectos de los corticosteroides administrados por vía oral durante una infección aguda por herpes zóster para prevenir la neuralgia posherpética seis meses después de la aparición del herpes (cociente de riesgos [RR] 0,95; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,45 a 1,99; dos ensayos, 114 participantes; evidencia de certeza muy baja (rebajada por riesgo grave de sesgo e imprecisión muy grave)).

Los otros tres ensayos que cumplieron los criterios de inclusión no se incluyeron en el metanálisis porque no proporcionaron información separada sobre el número de participantes con NPH a los seis meses.

En los cinco ensayos incluidos se informaron eventos adversos durante o dentro de las dos semanas posteriores a la interrupción del tratamiento.

No se observaron diferencias en los casos graves (RR 1,65; IC del 95%: 0,51 a 5,29; cinco ensayos, 755 participantes; evidencia de certeza muy baja (rebajada según el riesgo grave) sesgo e imprecisión muy grave)), o eventos adversos no graves (RR 1,30; IC del 95%: 0,90 a 1,87; cinco ensayos, 755 participantes; evidencia de certeza baja (rebajada por riesgo de sesgo grave e imprecisión grave)) entre los corticosteroides y grupos de placebo.

Uno de estos ensayos tuvo un alto riesgo de sesgo debido a datos de resultados incompletos, dos tuvieron un riesgo de sesgo incierto y el otro tuvo un riesgo bajo de sesgo.

La revisión se publicó por primera vez en 2008; no se identificaron nuevos ECA para su inclusión en actualizaciones posteriores en 2010, 2013 y 2023.

CONCLUSIONES DE LOS AUTORES. Según las pruebas disponibles actualmente, no hay seguridad acerca de los efectos de los corticosteroides administrados por vía oral durante una infección aguda por herpes zoster en la prevención de la neuralgia posherpética.

Los corticosteroides administrados por vía oral o intramuscular pueden producir poca diferencia en el riesgo de eventos adversos en personas con herpes zoster agudo.

Algunos investigadores han recomendado el uso de corticosteroides para aliviar el dolor asociado al zóster en la fase de la enfermedad.

Si se diseñan investigaciones adicionales para evaluar la eficacia de los corticosteroides para el herpes zóster, se debe incluir un seguimiento a largo plazo para observar su efecto en la transición del dolor agudo a la neuralgia posherpética.

Los ensayos futuros deben incluir mediciones de la función y la calidad de vida, así como medidas actualizadas del dolor.

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